Así llevan ONG Rescate y Generaciones Fotovoltaicas de la Mancha el agua a las comunidades más vulnerables de Jordania
Con la ayuda de la AECID, la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo, ONG Rescate y Generaciones Fotovoltaicas de la Mancha desarrollan en Jordania un proyecto innovador que permite obtener agua potable a partir de la condensación del vapor que está en la humedad ambiente
Con el estallido de la guerra en Siria en 2011 y el éxodo masivo de personas que supuso, su vecina Jordania se convirtió el segundo país del mundo con mayor tasa de personas refugiadas por habitante. 70 de cada mil personas viven en el país refugiadas, según datos del ACNUR, la mayoría procedentes de Siria.
La llegada de cerca de 665.000 personas, sumada a las 100.000 que ya se encontraban en el país, fundamentalmente a Amman, la capital, ha hecho que en los últimos años no solo la densidad de población sea mayor, sino que los suministros hayan comenzado a escasear y los servicios básicos sean cada vez más precarios. Así, por ejemplo, el aumento demográfico ha incrementado el déficit energético, más si se tiene en cuenta que Jordania es un país que importa prácticamente la totalidad de los recursos como el gas natural o el petróleo.
Además, Jordania es el tercer país con mayor estrés hídrico del mundo, lo que se traduce en una enorme escasez de agua. Al más del 80% del territorio nacional desértico hay que sumar la falta de conciencia sobre la importancia del agua y las fugas físicas (conexiones ilegales, agua no facturada…) que suponen 76.000 millones de litros cada año.

En busca de soluciones
Para tratar de paliar esta situación, desde ONG Rescate iniciamos en diciembre de 2019 en el municipio de Al Sarhan -uno de los que mayor población refugiada alberga- un proyecto que no solo busque soluciones tecnológicas innovadoras y alternativas al suministro de agua tradicional, sino que también haga incidencia, por medio de la formación y la concienciación, en la importancia de cuidar el agua y cambiar los hábitos de suministro y consumo.
Para lograr el éxito en el proyecto trabajamos de la mano de la empresa española Generaciones Fotovoltaicas de la Mancha (GFM), que se encarga de instalar en un centro comunitario del municipio, gestionado por la Tawasul Association for Family and Childhood Development, un sistema de abastecimiento de agua que, funcionando con energía solar, obtiene ésta a través de la condensación del vapor en la humedad ambiente. Es decir, capta el aire del exterior, lo transforma en agua y lo somete a un proceso de potabilización y eliminación de partículas. Esta solución, que puede generar unos 100 litros de agua al día, es un proyecto totalmente autónomo y una apuesta que puede ser replicable y escalable en otras zonas del país.
Radiación solar
A través de la radiación solar, la tecnología empleada por GFM consigue generar energía que se emplea en el suministro de un generador atmosférico de agua. Este generador replica el proceso natural de la lluvia, condensando el agua del aire a través de refrigeración. El aire es obtenido del ambiente y tratado a través de sistemas de filtración, lo que permite obtener un agua apta para el consumo humano y en cumplimiento con los estándares de la OMS. Además, el exceso de electricidad es almacenado en baterías para su uso posterior y todo el sistema es controlado a través de un sistema que permite supervisar los resultados de generación de agua y electricidad de forma remota.
Según explica el CEO de GFM, Javier Bustos, tras sus primeras experiencias en proyectos internacionales se dieron cuenta que la escasez de electricidad y agua suelen ir de la mano y de que en aquellos lugares donde la electricidad escasea, también lo hacen otro tipo de recursos como el agua. “Si bien es cierto que el acercamiento de la electricidad hasta lugares remotos permite obtener agua a través de bombeo de aguas subterráneas, la realidad es que no hay agua bajo todos los suelos y en muchos lugares del mundo, si se quiere conseguir agua, es necesario optar por otras tecnologías”, explica Bustos, que reconoce que así fue como se les ocurrió la opción de generar electricidad para la producción de agua a través de condensación, cuya tecnología es muy novedosa.

Comunidades concienciadas
Para alcanzar el éxito en materia de sensibilización de la población local, las personas responsables del proyecto en el terreno, junto con la organización jordana Future Pioneers, imparten formación en materia de gestión y uso eficiente del agua, así como sobre energías renovables, eficiencia energética y cohesión social.
Para Hajer, la directora del centro comunitario, estos talleres -en los que se ha empezado por formar a 20 de las personas más influyentes de la comunidad con la idea de que puedan transmitir lo aprendido- suponen un cambio no solo en el auto empoderamiento de la comunidad, sino una mejora en las condiciones de vida, ya que el desarrollo tecnológico implementado en el municipio permite cosas tan básicas como utilizar los aires acondicionados cuando las temperaturas son muy elevadas, además de ahorros significativos en agua embotellada.
El mismo cambio lo ha supuesto para Hashem Al Sarhan (23 años, estudiante universitario) o Ghuson Shehadat (36 años, refugiada siria), quienes participaron en las primeras formaciones y reconocen ahora haber tomado conciencia de las dificultades en las que se puede encontrar Jordania en las próximas décadas si no se pone remedio al problema de la falta y mala gestión del agua.

Ambos han cumplido lo acordado tras recibir la formación y han difundido el mensaje entre sus comunidades, logrando cambios sustanciales en la vida de centenares de personas, quienes en muchos casos han empezado a ver, incluso, cómo sus facturas de agua se reducen gracias a un consumo responsable y a pequeños cambios llevados a cabo en los grifos del hogar. Además, muchas personas han comenzado a reutilizar el agua consumida en el hogar para regar los olivos y limoneros que rodean sus casas.
Todas las partes que participamos en este proyecto estamos convencidas de que, si las nuevas generaciones crecen con la información adecuada, las posibilidades de alcanzar cambios sustanciales se multiplicarán.